Como la mayoría de las partes del cuerpo, los pechos pueden doler de vez en cuando por diversas razones. El dolor mamario es frecuente, pero muy raramente se trata de algo grave. 

Aquí encontrarás algunas de sus posibles causas, así como algunos consejos para encontrarte mejor.

¿Qué puede causar dolor en los pechos?

La pubertad

Los pechos empiezan a aumentar de tamaño alrededor de la pubertad y a menudo se tienen molestias. La mayoría de las mujeres comienzan la pubertad entre los 8 y los 13 años, y suelen empezar a tener pechos hacia los 10 u 11 años. 

Al principio, es posible que notes un bultito parecido a un botón bajo la zona del pezón. Se llama botón mamario y es normal que sea un poco sensible al tacto. 

A veces a los niños se les desarrollan las mamas durante la pubertad, lo que se conoce como ginecomastia. Este desarrollo suele desaparecer por sí solo.

El síndrome premenstrual (SPM)

El síndrome premenstrual es un grupo de cambios físicos y en el estado de ánimo que se presentan antes y durante el período menstrual o la regla. Un cambio frecuente es el dolor en los pechos.

Las concentraciones de algunas hormonas cambian durante el síndrome premenstrual. Esto puede hacer que el cuerpo retenga agua, lo que causa hinchazón y distensión. El líquido de sobras aumenta el tamaño de los pechos. También hace que se estiren los nervios, de modo que los pechos pueden ser sensibles al tacto y presentar molestias o dolor. A veces puede parecer que los pechos te han aumentado de volumen de la noche a la mañana.

El embarazo 

La hinchazón y sensibilidad en los pechos puede ser uno de los primeros signos del embarazo, junto con la ausencia de la menstruación (regla). Habla con uno de tus padres y con tu médico de inmediato si crees que podrías estar embarazada.

¿Qué puedo hacer para aliviarme el dolor?

Si te duelen los pechos debido al síndrome premenstrual, los síntomas deberían desaparecer cuando concluya el período menstrual.  Aquí encontrarás algunos consejos que te pueden ayudar a encontrarte mejor: 

• Toma un medicamento contra el dolor (analgésico), como el paracetamol o el ibuprofeno.
• Utiliza un sujetador que te sujete bien los pechos.
• Haz ejercicio con regularidad.
• Come alimentos saludables. Prueba a reducir el consumo de alimentos y bebidas que contengan mucha cafeína (como el café, el té, los refrescos y el chocolate) o sal. Seguir una dieta rica en calcio puede ayudar a aliviar la sensibilidad mamaria y otros síntomas del síndrome premenstrual. 
• Duerme lo suficiente. Los adolescentes necesitan aproximadamente 8-10 horas de sueño por noche. 
• Distráete. A veces, distraerse para no pensar en el dolor es lo mejor que se puede hacer. Acurrúcate en el sofá con un cojín y ve una buena película.

¿Qué más debería saber?

Consulta a tu médico si tienes un dolor de mamas más agudo o que te dura más de lo habitual, o un dolor que te preocupa por cualquier otro motivo. Llámalo también si notas secreción en uno o ambos pechos. 

Tu médico puede hacerte una exploración mamaria, donde presionará ligeramente distintas partes de tus pechos. Es rápido y le puede ayudar a averiguar qué es lo que te pasa.