¿Cómo puedo afrontar mi asma?
¿Cómo puedo afrontar mi asma?
La mejor forma de controlar el asma consiste en seguir un plan de acción contra el asma. Tu médico te dará un plan de acción contra el asma elaborado específicamente para ti. Hacer todo lo que indica el plan (incluso aunque te sientas bien) te ayudará a prevenir los ataques y te mantendrá alejado de la sala de emergencias.
Maneras de respirar mejor
Una vez que tengas el plan, los siguientes consejos pueden ayudarte a cumplirlo:
- Entiende tu plan de acción contra el asma. Pídele a tu médico que te explique por qué cada paso y cada medicamento que contiene tu plan de acción contra el asma son importantes. Sentirás que controlas más la situación si entiendes qué es lo que está ocurriendo exactamente. Revisa el plan cada vez que vayas al médico y explícale cuándo puedes tener problemas con el plan y por qué.
- Utiliza las herramientas de control del asma. Incluso aunque te encuentres completamente bien, no abandones los medicamentos de control a largo plazo (también llamados "medicamentos de mantenimiento" o "medicamentos de tipo preventivo") que tomas cada día, si forman parte de tu plan de tratamiento. Aunque pueda ser tentador saltarse algunas tomas de estos medicamentos y confiar exclusivamente en los medicamentos de rescate (o de alivio inmediato), esto no suele funcionar.
- Fíjate un horario. Es fácil despistarse y olvidarse de tomar un medicamento, pero será menos probable que eso ocurra si organizas tomarte los medicamentos o llevar a cabo ciertos pasos para el control de tu asma a la misma hora todos los días. Convierte tomar los medicamentos en una parte de tus rutinas cotidianas, como la conducta de cepillarse los dientes.
- No fumes. Si fumas, habla con tus padres o con un médico sobre métodos para dejar de fumar. Si tus amigos fuman, no te quedes a su lado cuando enciendan un cigarrillo porque el humo del tabaco fumado por otras personas es un desencadenante frecuente de las crisis asmáticas. Si alguien de tu familia fuma, habla con él para que deje de hacerlo.
- Controla tu entorno. Los desencadenantes medioambientales, como los ácaros del polvo y la caspa animal, pueden ser peligrosos si padeces asma. Si tienes mascotas, no permitas que Fido o Fluffy entre en tu habitación. Además, trata de mantener tu habitación sin polvo, limpiándola regularmente, y habla con tu médico sobre el uso de fundas especiales para el colchón y las almohadas.
- Ponte la vacuna antigripal todos los años. Las autoridades médicas recomiendan que todos los niños y adolescentes se pongan la vacuna antigripal. Estas vacunas son especialmente importantes para las personas con asma. Si una persona asmática contrae la gripe, tiene más probabilidades de desarrollar una enfermedad más grave.
- Busca un deporte o actividad que sea adecuado para ti. Algunos deportes, como la natación y el béisbol, tienen menos probabilidades de desencadenar crisis asmáticas que otros. Muchos deportistas con asma han descubierto que, con el entrenamiento y los medicamentos adecuados, pueden practicar cualquier deporte que se propongan, hasta en los deportes de resistencia o los que se practican a bajas temperaturas. El deporte te puede levantar el ánimo, lo que puede ser de gran ayuda cuando te sientas frustrado porque padeces asma.
El hecho de utilizar un plan de acción contra el asma para afrontar esta enfermedad es positivo no solo para tu salud. Acostumbrarte a seguir este plan también te puede aportar una disciplina para seguir más planes de acción en el futuro y tener éxito en otras facetas de la vida.
Reviewed by: Elana Pearl Ben-Joseph, MD
Date Reviewed: May 15, 2017