El asma es una de las principales razones de que los niños falten a clase. En Estados Unidos, según los CDC, los niños pierden más de 13 millones de días de clase al año a causa del asma.
Pero si el asma está bien controlada, es mucho menos probable que un niño tenga que faltar a clase. Cuando el asma de un niño está bajo control, tiene muchas menos crisis asmáticas.
Trabaje con el médico de su hijo para crear un plan de acción para el asma, sea por escrito o de tipo electrónico, que le indicará qué medicamentos necesita tomar su hijo, cuándo debe tomarlos y qué desencadenantes debe evitar, entre otras cosas. Comparta el plan con el equipo escolar de su hijo.
Al empezar el año escolar, reúnase con los maestros de su hijo y con otro personal de la escuela para hablar sobre el plan, incluyendo:
Es importante que el ambiente escolar apoye a su hijo a ir asumiendo su propio cuidado. Sin esta ayuda, los niños podrían no tomar sus medicamentos. Anime al personal de la escuela a ayudar a su hijo a establecer una rutina con la que se sienta cómodo.
Lo ideal es que los niños asmáticos dispongan en todo momento de sus medicamentos de alivio rápido (también llamado medicamento de rescate o de efecto inmediato). Para los alumnos que no tengan la edad suficiente como para tomar el medicamento por sí solos, su maestro lo debe guardar en el aula o bien este debe estar disponible (y no guardado bajo llave) en la enfermería de la escuela.
En cuanto los niños sean lo suficientemente mayores como para saber cómo y cuándo tomar su medicamento, deberán llevarlo siempre encima, si es que la escuela se lo permite. El médico lo puede ayudar a decidir cuándo su hijo debería ser responsable de sus medicamentos.
Hable con las autoridades de la escuela sobre qué es lo que está permito hacer. Insista en la importancia de que su hijo reciba tratamiento inmediato durante las crisis asmáticas. Si dejan que su hijo se tome el medicamento solo, es posible que le pidan que firme un "contrato de asma". Este documento indica que usted autoriza a su hijo a tomar el medicamento y, si fuera necesario, quién le podría administrar el medicamento a su hijo. En la escuela, también deberían saber cuándo ponerse en contacto con usted o llamar al 911 si su hijo tuviera una crisis asmática grave.
Parte de la prevención de las crisis asmáticas consiste en evitar sus desencadenantes, como el moho, la caspa animal y el polvo de la tiza. Haga saber al personal de la escuela cuáles son los desencadenantes del asma de su hijo. También puede hacer lo siguiente:
Reviewed by: Elana Pearl Ben-Joseph, MD
Date Reviewed: Mar 10, 2024
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