Yo no fumo, pero mi pareja sí. Quiero ayudarla a dejar de fumar, ¿qué puedo hacer?

Para que puedas ayudar a tu pareja a dejar de fumar, esa persona tiene que querer dejarlo. Debido a que la nicotina es adictiva, dejar de fumar puede ser difícil. Pero puedes sugerirle algunas cosas que pueden ayudar. El mero hecho de saber que cuenta con tu apoyo puede aumentar sus probabilidades de éxito. Ofrécete a ayudar a elaborar un plan para dejar de fumar. Esto podría significar elegir una fecha para dejar de fumar, animar a tu pareja a hablar con su médico sobre la terapia de sustitución de la nicotina, a mantenerse centrado en cuanto deje de fumar y a encontrar una buena manera de recompensarse a sí mismo cuando vaya superando las distintas etapas. 

Puede ser útil fijarse varios objetivos más reducidos, como 2 semanas, 1 mes y 2 meses sin fumar. También puedes ayudar a tu pareja evitando las cosas que antes la incitaban a fumar, como visitar la casa de ciertos amigos. Recuérdale (sin reñirla y sin sermonearla) las ventajas de dejar de fumar, incluyendo todo el dinero que se podrá ahorrar. Y recuerda que, al final, tu pareja es quien tiene que decidir si está o no preparada para dejarlo, aunque tu apoyo y tu ánimo puedan marcar la diferencia.