"Encefalopatía" es un término amplio que se utiliza para describir una disfunción del cerebro. Existen muchos tipos de encefalopatías.

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Las encefalopatías tienen una gran lista de causas entre las que se encuentran las infecciones, las intoxicaciones por alcohol, los traumatismos en el cerebro, la insuficiencia renal y hepática, y la exposición prolongada a sustancias químicas nocivas. El funcionamiento anormal del cerebro también puede deberse a la falta de suministro de sangre o de oxígeno al cerebro, los trastornos metabólicos, la desnutrición y otras causas.

El principal síntoma de todas las encefalopatías es un estado mental alterado. Otros síntomas dependerán del tipo de encefalopatía y de su gravedad. Entre ellos, se incluyen la falta de concentración, la pérdida progresiva de la memoria y la capacidad cognitiva, el letargo, los cambios de personalidad e incluso la pérdida de la conciencia. Una persona con encefalopatía también podría tener temblores y sacudidas musculares, movimientos rápidos e involuntarios de los ojos, debilidad muscular, demencia, incapacidad para tragar o hablar y convulsiones.

Los síntomas pueden ser constantes o pueden ir y venir, o empeorar progresivamente.

El tratamiento de la encefalopatía dependerá de la afección que la causó. Los casos leves o agudos suelen ser tratables, pero la encefalopatía avanzada puede causar daño cerebral permanente y la muerte.

Tenga en cuenta lo siguiente

Mientras que algunas personas con encefalopatía necesitarán cuidados a corto plazo, la mayoría necesita un control estricto y tratamiento de un médico para mantener la función cerebral y prevenir un deterioro mayor.

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